Cuando se trata de realizar una instalación y elegir tu suelo de interior, el suelo vinílico es una opción muy demandada debido a la facilidad de su mantenimiento, la amplia gama de diseños disponibles y la impermeabilidad al agua.
La instalación de este tipo de suelos depende del material que escojas. Los principales tipos son el suelo vinílico en click y el vinílico autoadhesivo. En ambos casos es importante seguir una serie de pasos y recomendaciones para asegurar una instalación correcta y duradera del suelo, y para ello también es fundamental seguir las instrucciones del fabricante, ya que cada material tiene sus recomendaciones y preparaciones específicas.
En Dioco encontrarás una guía de cómo instalar cada uno de nuestros productos. Veamos ahora unas recomendaciones para la instalación de suelo vinílico de interior.
Preparación de la superficie
Lo primero que hay que preparar es el subsuelo en el que se va a colocar el suelo vinílico, y para ello la superficie tiene que estar completamente limpia y seca. No deben quedar restos de polvo, grasa u otros contaminantes que puedan afectar a la adhesión del vinilo en el suelo, especialmente con el suelo vinílico autoadhesivo.
Es importante que compruebes que el suelo está nivelado y libre de irregularidades para que la instalación resulte sencilla y, sobre todo, que el espacio quede visualmente atractivo. En el caso de que haya huecos en la superficie o desniveles, tienes que rellenar y alisar la zona para que quede nivelada.
Podrás colocar el vinilo sobre otro tipo de suelo existente, baldosas o madera contrachapada, pero siempre que la superficie esté en buen estado.
Aspectos necesarios para la instalación
Previamente a la colocación del suelo es necesario tener en cuenta algunos factores y herramientas a utilizar:
- Acondicionamiento del suelo. Cuando vas a instalar un suelo vinílico es importante que adaptes el material a la temperatura ambiente de la habitación, al menos durante 48 horas. De esta manera el producto se ajustará a la temperatura y humedad del ambiente, evitando contracciones o expansiones.
- Herramientas para la instalación. Valora previamente contar con las distintas herramientas que necesitarás, como un cúter para vinilo, regla, cinta métrica, escuadra, martillo de goma (si es vinílico en click) o rodillo de presión (si es autoadhesivo), por ejemplo.
Instalar suelo vinílico en click
Veamos algunos aspectos importantes para la instalación del suelo vinílico en click:
- Planificación del diseño. Valora la habitación en la que vas a instalar el suelo y la dirección en la que pondrás el vinílico. Una recomendación es colocarlo paralelo a la principal fuente de luz o a la pared más larga, para dar una mejor apariencia estética.
- Espacio entre paredes. Deja entre 5-10 milímetros entre el vinilo y la pared para permitir la expansión o contracción del material ante los cambios de clima y humedad.
- Colocación. Puedes empezar por una esquina de la habitación y colocar la lengüeta de la lama hacia la pared. Ayúdate del uso de cuñas para asegurar el espacio de expansión que te acabamos de mencionar.
- Ajuste de lamas. Corta y ajusta las lamas según sea necesario para adaptarlas a los bordes de las paredes o cualquier otro elemento. Procura que los cortes sean precisos utilizando una sierra de calar, por ejemplo.
- Retira las cuñas. Cuando hayas puesto todas las lamas puedes retirar las cuñas de expansión.
- Colocación de los rodapiés. Una vez está instalado el suelo y retiradas las cuñas, es momento de instalar los rodapiés para cubrir el espacio y dejar un buen acabado estético. Puedes consultar nuestra selección de rodapiés para suelo vinílico, como complemento del suelo de interior.
Instalar suelo vinílico autoadhesivo
Veamos algunas recomendaciones para instalar este tipo de suelo:
- Preparación del patrón. Planifica el diseño que quieres dar a la habitación para obtener un patrón uniforme. Puedes utilizar cuerda o línea de tiza para marcar líneas guía que te faciliten el trabajo.
- Colocación. Retira el protector del adhesivo de la parte trasera de la lama y colócala en la superficie limpia, siguiendo el trazado de las líneas guía que has marcado.
- Ejerce presión. Utiliza una herramienta como el rodillo de presión que te comentábamos para eliminar cualquier burbuja de aire que pueda quedar y lograr una completa adhesión. Presiona la lama para que quede bien asegurada en la superficie.
- Cortes y ajustes. Como ocurría con el suelo vinílico en click, corta y ajusta las lamas según los bordes y esquinas que tengas.
- Revisión. Cuando tengas las lamas instaladas te recomendamos que revises que estén bien adheridas al suelo y alineadas correctamente unas con otras.
La instalación de suelo de interior es un proceso que requiere de preparación y paciencia para lograr un acabado duradero y estético. Si tienes en cuenta los pasos y recomendaciones que te hemos dado en esta guía, así como las recomendaciones del fabricante, lograrás instalar tu suelo vinílico con un buen resultado.
Dioco
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